jueves, 30 de julio de 2009

de tal lejos, de tan cerca.


Se llenaron de silencios los rincones de este viejo mágico lugar.

Sangran las paredes de soledad... se oyen ecos de recuerdos.

Robé tus costumbres matinales para llorarte en cada acción.

Brilló tanto esta casa.

Me quedó el alma vacía de nuevo.

Es todo tan fácil a vuestro lado.

Las mañanas sin sonrisas matutinas

sin vosotras encima de mi cama

sin tostadas

sin agua hirviendo en la cocina

sin limpieza

sin palacios transformados entre telas viejas

sin arreglos

Vuelven las mañanas cotidianas Porteñas

las del mate

las 9 de oro, los libros, las clases

los ensayos, el siete

la vejez de este lugar con flores en el cristal

y Cervantes en mi habitación

con la mitad de mi guarida

con mis libretas y el skype

Me lleno de recuerdos

de tristeza, de tan lejos

de llorar

de frío con ropa de invierno y pendientes estrella

Me quedó el amor

pero ya no se si lo quiero de tan lejos.

Tal vez a veces quisiera volver y la verdad es que siento que os quiero tener cerca.

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